La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) expresó su respaldo al nuevo Acuerdo que regula la importación de vehículos pesados usados, el cual introduce criterios ambientales más estrictos para su ingreso al país. Con esta medida, la industria busca reforzar la protección del medio ambiente y establecer reglas claras que limiten la entrada de unidades que no cumplen con las normas vigentes.

El documento fue publicado el 4 de noviembre de 2025 en el Diario Oficial de la Federación y define las condiciones bajo las cuales podrán importarse vehículos con motor a diésel y peso bruto vehicular superior a 3,857 kilogramos. Este instrumento marca un paso relevante en la política de control ambiental, ya que fija límites técnicos precisos y contribuye a reducir la contaminación derivada de unidades antiguas y con tecnologías obsoletas.

La ANPACT destacó que la regulación busca garantizar que los vehículos pesados usados que ingresen al país cumplan con requisitos mínimos de emisiones, seguridad y eficiencia energética. Con ello, se mitigan los efectos negativos que la importación indiscriminada de unidades chatarra provoca en el medio ambiente, el empleo y la competitividad de la industria automotriz nacional.

“Nos congratulamos con el trabajo técnico desarrollado por la ANPACT para lograr la publicación de este Acuerdo que alinea la regulación vigente de emisiones con los años de antigüedad de los vehículos usados que se importan a México con un límite de diez años. Esta medida constituye un avance en la contención de la importación de vehículos pesados chatarra provenientes de Estados Unidos y representa un trabajo conjunto del Gobierno Federal, encabezado por la Dra. Claudia Sheinbaum, con la Secretaría de Economía y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), bajo el liderazgo de Marcelo Ebrard Casaubón y Alicia Bárcena, respectivamente con el equipo técnico de ANPACT”, señaló Rogelio Arzate, presidente ejecutivo de ANPACT.

En 2024, la importación de unidades pesadas usadas alcanzó más de 29 mil vehículos, lo que significó un aumento de tres veces respecto al año anterior. Esta cifra impactó directamente en la renovación de la flota y en la estabilidad del mercado interno, afectando a micro, pequeñas y medianas empresas que enfrentaron competencia desleal por la entrada de unidades subvaluadas y fuera de norma.

De acuerdo con la ANPACT, la actualización del Acuerdo no sólo impulsa la protección ambiental, sino que también fomenta una competencia más equitativa al fortalecer la cadena de suministro nacional y promover el consumo de productos fabricados en México. La organización considera que esta medida representa un equilibrio entre el desarrollo económico y la sostenibilidad.

El documento establece lineamientos ambientales claros, como el año-modelo máximo de las unidades, la homologación de estándares de emisiones y la obligación de cumplir con la normatividad vigente. Estas disposiciones contribuyen a mejorar la calidad del aire y a cumplir los compromisos internacionales de México en materia de desarrollo sustentable y transición energética.