La corrupción en los Centros de Verificación Ambiental o también llamados Verificentros Autorizados establecidos en el Estado de México y que es solapada por autoridades de la Secretaria del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible debería ser investigada a fondo para terminar así con la cadena de complicidades y protección de que gozan gracias a las millonarias sumas que reciben funcionarios de esa secretaria que encabeza Alhely Rubio Arronis.

Las denuncias de como operan en perjuicio del medio ambiente y de los propietarios de vehículos los Verificentros ubicados en Naucalpan, uno de ellos el NA951, denominado Naucalpan S.A. de C.V; el NA953 con razón social Sistema Ecológico Gonmex S.A. de C.V. y el TL901, Servicio Proaire Metropolitano S.A. de C.V., este último establecido en el municipio de Tlalnepantla tienen un común denominador y se llama Zeus Piña, personaje con un historial digno de una novela policiaca que contaremos más adelante; reconocido dentro del priismo del Estado de México, y ahora también en Morena, donde ha tejido finamente y con su apoyo a consolidado negocios en varios municipios mexiquense y en el estado de Puebla.

Personajes cercanos a Piña, plenamente identificados denunciaron las relaciones que presume tener éste al interior Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, donde dice reporta de manera mensual cantidades importantes de dinero para dejarlo trabajar, lo anterior tienen lógica, ya que a pesar de los continuos señalamientos de corrupción esos centros continúan operando.

Las acusaciones refieren también que empleados de Medio Ambiente reciben un “sobre” cada que realizan una visita de inspección para evitar les cierren las líneas de verificación, independientemente de que les ponen sobre aviso cuando salen camionetas para inspección, lo que les permite no ser sorprendidos como dice el vulgo, “en la movida”.

Señalan asimismo que todo vehículo que ingresa, de “manera voluntaria” es obligado a pagar el famoso “brinco”, los carros 2021 hacia abajo son forzados para que sean rechazados y como consecuencia enviados vehículos enviados al Programa Integral de Emisión de Emisores Contaminantes (PIREC) para que sin necesidad tengan que cambiar su catalizador catalítico, mismo que ahí mismo promueven.

Por ejemplo, en el Centro NA951, los carros que son pintados en el parabrisas con un marcador blanco con un punto en la parte de arriba, indica que el vehículo debe pasar la prueba; con un punto en la parte media del parabrisas indica que la prueba será real, tal cual arroje los resultados del vehículo sin ser alterados y punto en la parte de abajo del parabrisas indica que el vehículo deberá emitir un rechazo (normalmente vehículos recientes que no aceptan pagar el brinco).

La corrupción es tan descarada en estos Centros de Verificación como el NA951 donde la gerente es Perla Sahara Piña, colocan una letra en el ticket que indica sin son 50 o 250 pesos los que se deben de cobrar adicionales…

En nuestra próxima entrega, quien y como desplazan el dinero que se recauda producto de la corrupción en el NA951 y como opera el TL901… Hay libretas que hablan… HASTA LA PROXIMA