En un contexto donde 9 de cada 10 personas que renuncian a su empleo por responsabilidades de cuidado son mujeres, y 70% de quienes desean trabajar no pueden hacerlo por falta de apoyos para el cuidado de hijos o adultos mayores, el sector privado comienza a implementar soluciones concretas. Así lo revela el estudio “Prácticas favorables a la familia y la primera infancia en el sector privado en México”, presentado por Fundación FEMSA y la Corporación Financiera Internacional (IFC), miembro del Grupo Banco Mundial.

El informe documenta cómo empresas mexicanas han adoptado políticas laborales enfocadas en la conciliación familiar, con resultados positivos tanto para el bienestar infantil como para la productividad empresarial. “Apoyar a la primera infancia beneficia a todos: empresas, colaboradores y sus familias”, afirmó Sindy González Tijerina, gerente de Primera Infancia de Fundación FEMSA.

Entre los casos destacados se encuentra Viva Aerobus, que instaló salas de lactancia en oficinas y aeropuertos, entregó kits de extracción de leche, otorgó licencias adicionales y organizó talleres. Gracias a estas acciones, el 96% de las empleadas que tomaron licencia de maternidad entre 2023 y 2024 continúan activas en la empresa.

Gentera, por su parte, implementó una alianza con Advenio para ofrecer servicios de cuidado infantil. En lo que va de 2024, 62 niños han sido atendidos y el 95% de las colaboradoras regresaron a sus puestos tras su licencia de maternidad.

FEMSA Servicios opera bajo un esquema híbrido a través del programa FEMSA Flex. En una encuesta interna, 68% del personal consideró que esta política ayuda a reducir el agotamiento laboral, mejorando su desempeño. En tanto, Coca-Cola FEMSA implementó el programa Niños KOF, que reconoce los logros académicos y deportivos de hijos e hijas del personal, con 43 eventos realizados en 204 sedes durante este año.

Para Juan Gonzalo Flores, Country Manager de IFC, “las políticas favorables a la familia son una inversión estratégica que impulsa la igualdad de género y fortalece al sector privado”. El estudio concluye que estas acciones no solo atienden una necesidad urgente en términos de equidad y cuidado, sino que también reducen la rotación de personal y posicionan a las empresas como lugares de trabajo más justos y competitivos.