En el corazón de las calles más vibrantes de la Roma Norte, se encuentra un rincón que ha conquistado a los comensales más exigentes: In Mano. Lejos de los clichés que abundan en la oferta italiana de la ciudad, este restaurante se especializa en focaccias artesanales, elaboradas con ingredientes de primera calidad y un enfoque auténtico pero contemporáneo.

La experiencia comienza desde el momento en que se cruza la puerta: un espacio moderno y acogedor, con una atmósfera cálida que invita a quedarse. Sin pretensiones, pero con mucho carácter, In Mano logra ser a la vez un refugio del ajetreo urbano y el escenario ideal para compartir una comida que deja huella.

El corazón de su propuesta está en las focaccias. Entre sus distintas versiones, tres se han consolidado como las favoritas del público:

Caravaggio, con mortadela, pesto In Mano, pistache y stracciatella.

Da Vinci, con prosciutto, arúgula, jitomate y un suave spread de ricotta que equilibra todos los sabores.

Botticelli, con provolone, roast beef, pepinillo y mostaza Dijon.

A esta propuesta se suman vinos cuidadosamente seleccionados y cervezas artesanales que complementan sin complicar, aportando el maridaje perfecto a cada bocado.

“Cada detalle está pensado para acompañar la experiencia, sin distraer de lo esencial: una comida deliciosa, bien hecha, que celebra lo mejor de la tradición italiana desde una perspectiva fresca y contemporánea”, afirma Juan Pablo Aboumrad, socio de In Mano.

Más que replicar lo ya conocido, In Mano apuesta por ofrecer algo distinto, memorable y accesible. Su visión se enfoca en quienes valoran los sabores bien definidos, el buen servicio y un ambiente que equilibra diseño y comodidad.